DICE Jorge Carvajal en su libro “Un Arte de Curar” que “la terapéutica es el arte de vibrar con aquello que mueve el corazón y la mente humanos; necesitamos emprender la empresa de una medicina que pueda ver en las arterias del hombre un reflejo de los ríos de la Tierra; que pueda vislumbrar el devenir de la conciencia humana en ese mar de estrellas que allá arriba nos indican que quizá en el cerebro el universo entero se refleja.”
LOS Terapeutas en Medicina Complementaria, también llamados Terapeutas Holísticos, trabajamos en el campo de la bioenergética. La Bioenergética es la energía de la vida, del cuerpo humano y de todo ser viviente.
TRABAJAMOS con Terapia Vibracional que acompañada de la medicina física – mecánica o medicina convencional buscan el libre flujo de la energía en todo el sistema del ser humano desde su cuerpo físico, su nivel emocional, nivel mental y nivel espiritual para obtener salud, curar alguna dolencia física o emocional, debido a un bloqueo, una fuga o a una carencia en lo energético como en lo físico. El ser humano es una unidad conformada por nivel emocional, mental y espiritual que al estar alguno o algunos en desequilibrio y no comunicarse bien entre ellos se manifiesta la enfermedad en el cuerpo físico. El tratamiento en bioenergética se dirige a restaurar patrones alterados de información y energía para prevenir futuras alteraciones orgánicas, todo trastorno energético se manifiesta en alteraciones funcionales y físicas.
LOS beneficios de la Terapia Vibracional sin intervención de la medicina física-mecánica son igualmente beneficiosos porque previenen esas temidas manifestaciones en el cuerpo físico ya sea en órganos, sistema nervioso, sistema cardiovascular, aparato digestivo, sistema muscular, sistema endocrino, sistema respiratorio así como el sistema inmunológico, aparato urinario, sistema reproductor.
EN las técnicas terapéuticas se utiliza la energía vibracional de la luz, el color, el sonido, el olor, formas, imanes, nuestras propias manos, elementos netamente producto de la sabia naturaleza, terapia floral o esencias florales, bio-nutrición, alineación de Chakras entre otras, por su resonancia con cada nivel o campo del ser humano. Se aproximan estos elementos curadores a pocos centímetros por encima del cuerpo y en algunos casos se colocan delicadamente sobre el mismo principalmente en los 7 Chakras Principales o Centros Principales de Energía. La evaluación es mediante el pulso, kinesiología así como con radiestesia; a través de una conversación sobre síntomas, ambiente familiar y/o laboral, en el pasado y tiempo presente. Estos procedimientos sutiles en algunos casos evitan el uso de medicamentos o acorta su uso ya que facilitan cualquier tratamiento con medicina convencional.
UNA Terapia Energética Integral – T.E.I. puede estar compuesta de una a tres técnicas vibracionales de acuerdo a lo que necesita cada individuo. Cuando el flujo de energía es libre y la energía de los Chakras está equilibrada se puede aliviar situaciones como:
ü Contracturas musculares
ü Ansiedad
ü Baja autoestima
ü Emociones reprimidas
ü Contaminación ambiental
ü Alergias
ü Estrés
ü Problemas de sueño
ü Dolor de cabeza
LA Terapia de Limpieza del Campo Aurico, o llamado también Campo Bioplasmático así como Campo Energético, es otro de los procedimientos que practica el Terapeuta para los mismo fines que una Terapia Energética Integral – T.E.I con la ventaja que permite un mejor trabajo de cualquier terapia a aplicar y optimo resultado; es necesaria esta limpieza para empezar un nuevo año de vida en los cumpleaños, para comenzar el año, para recargarse de energías positivas, sellar el campo áurico como medida de protección.
MUCHAS veces el bloqueo del flujo energético o el desequilibrio de energías es causado por eventos emocionales principalmente o físicos, por una carencia de afecto, una carencia material, por la muerte de un ser querido, por la pérdida de algo o de alguien, exposición a radiación o quimoterapia, exposición a campos electro magnéticos, cicatrices, quemaduras, amputación de órganos, operaciones, piercing, tatuajes, ambiente familiar en conflicto, algún tipo de miedo, cualquier evento afectivo traumático, desadaptación en nuevo estatus (divorcio, casamiento, viudez, orfandad, cambio de residencia; entrada a la adolescencia, a la tercera edad, a la jubilación), etc.
ESPECIALISTAS en medicina convencional han abierto sus mentes hacia la práctica de la medicina complementaria, han dirigido su mirada al “misterio” del mundo interior por los resultados que los pacientes han obtenido, en algunos casos porque sus métodos especializados no habían funcionado, otros porque saben que funciona aunque no entiende el cómo.
