Búscalos porque existen, quizá los has olvidado por un tiempo, los debes haber usado antes, estoy segura, son una maravilla, si los vuelves a ver, no los dejas jamás, nunca pasan de moda; en algunos closets están guardados, olvidados. Te explico sus efectos y cómo los encuentras.Son esos zapatos que hacen sentir un porte bello y es un placer el pasearse, esos que cuando los usas sientes que tus piernas se alargan y se mueven desde las caderas para luego sentir que tus pies pisan fuerte, esos que estiran los costados de tu torso, entonces hundes el estómago fácilmente y los hombros rotan y se van hacia atrás, la columna se va poniendo en posición correcta y creces. Dan un efecto de SEGURIDAD y PRESENCIA innatos.
El efecto de este calzado llega incluso hasta el cuello, enderezando y separando las cervicales, alargándolo; la barbilla o mentón se pone paralelo al piso, las pestañas se levantan y alargan, miras hacia adelante y quieres ver más y puedes levantar las cejas sorprendiéndote tu de lo que ahora puedes ver, porque de repente...estas mirando más lejos que antes. Es el efecto del VALOR.
Al ponerte este calzado levantas la cabeza e inmediatamente te permite sonreír a quien se cruza, a quien te choca la mirada, lo saludas con una amabilidad que brota, no viene de fuera, viene de ti. Otro de sus efectos es la SONRISA INCONDICIONAL.
Estos zapatos tienen un nombre que conoces, es un nombre de abolengo, se llaman ACTITUD...póntelos, nadie tiene igual modelo, valen tanto y sin embargo el dinero no cuenta para obtenerlos, te hacen ganar en cualquier empresa que te propongas, van con la ropa de verano, invierno, otoño, primavera, con toda hora del día, incluso cuando estás por irte a descansar después de un día y difícil....es que son de abolengo. No los vas a conseguir afuera, en la calle, los tienes tu...quizá olvidados.
Terapias que sanan. Terapias que calman.
